Es este
problema familiar, laboral, social en sí, el que tiene
paradójicamente a la humanidad inhumana llevando entre su forma de
vida este desperfecto cotidiano manteniéndonos alejados de la salud
y bienestar social. Abarcando el tema de la “discriminación de
género” encontramos una inmensa cantidad de información que nos
hace preguntarnos ¿qué clase de vida estamos llevando? ¿Qué
pensaran las personas que sufren este problema? Sin darnos cuenta que
nosotros mismos sufrimos y somos parte de ello, es la completa
realidad que nos hace al mismo tiempo ignorar el problema, de esta
manera nos acostumbramos a tomarlo como normal sin darnos cuenta que
en realidad es un problema serio que siendo fuerte o no torio a casi
invisible es una problemática que destruye vidas.
Sabemos que
la mujer es el ser que más ha sufrido y aun en el presente sigue
sufriendo en todos los ámbitos, no se les permitían muchas cosas,
que si es real que ahora en nuestros días si se les permiten, pero
no significa que el problema se halla extinguido, hemos sabido y
presenciado la capacidad de una mujer en desempeñar el trabajo más
rudo conocido, dándonos cuenta de que es innecesario seguir
tolerando esta manera tan vil de estratificación por género. Las
posiciones altas laborales siempre han sido y seguirán siendo
propiedad de los hombres, y con el ya mencionado inmenso esfuerzo y
poder de la mujer el progreso en permitir que las mujeres se pongan
en las riendas de un puesto importante sigue siendo lento ya que la
cultura en sí de todo ser humano aun no se ha puesto en línea y no
acepta dicha capacidad.
Cabe
mencionar que uno de los principales efectos o consecuencias de la
violencia monótona contra las mujeres es el quebrantamiento de la
identidad que se supone debe existir en toda relación humana. La
violencia intrafamiliar va muy acompañada de este problema, hay
datos que dicen que hay muchas mujeres asesinadas solo por ser
mujeres, esto pues no queda más que si somos seres humanos llevar a
cabo un plan de conciencia y de acción social para acabarlo.
Como todos
sabemos la escuela es un escenario de ejemplos y supuesta manera
también de adquisición de valores, y en si pues es importante
porque es el primer escalón para que el niño y la niña se
encuentren en contacto con su autonomía, esta autonomía pudiera ser
retardada o ayudada por padres, maestros, o por ellos mismos, en este
ámbito escolar ellos podrían tomar un rumbo equivocado de cómo
afrontar agresiones psicológicas o problemas de este tema, sabemos
que en nuestro país predomina una cultura machista y esto conlleva
consigo una especie de estratificación entre hombres y mujeres
predicando una desigualdad, en la escuela la atención que la niña
recibe en cuanto a sus estudios es bastante menor a la que recibe el
niño, esto nos dice que ni siquiera el sector escolar está a favor
de la igualdad o que no hay buenos programas de estudio, en el ámbito
escolar las principales discriminaciones entre alumnos, podrían ser
las agresiones hacia mujeres, o a niños afeminados o con
características del sexo opuesto.
Los
principales protagonistas de la discriminación de género son los
alumnos, alumnas, profesores, profesoras, aunque los profesores y
profesoras no son culpables o participes de las etapas previas de la
vida de los niños, en la escuela participan en una gran mayoría de
causas con las que se va forjando una vida anormal. En su gran
mayoría los docentes promueven la inequidad de género tanto en la
manera de trasmitir mensajes como en la toma de decisiones. Cuando
tocan temas como el amor se hace alusión a los gustos o
adoctrinamiento a las niñas, pero cuando se habla de intelecto o
heroísmo se le atribuye o se dan ejemplos de hombres.
Solo fueron
unos sectores en los que se llevan a cabo estas estratificaciones
sociales anormales y que deberían de ser vergonzosas para todo
individuo que supuestamente debe ser consciente y humano para darse
cuenta de la problemática cotidiana social que nos está atacando y
desgarrando la moral humana y pudriendo principalmente la imagen del
género femenino.
Todos
sabemos y creo necesario hacer saber que este tipo de acciones e
ideologías depende del grupo étnico o cultura a la que se
pertenezca, como ya se dijo en la mayoría de las entidades el
problema ha ido mejorando pero aún falta mucho trabajo por hacer.
Nos dimos cuenta de que nosotros como seres humanos sedientos de
cambio tenemos que cavar con la disparidad del trabajo en la
remuneración entre hombres y mujeres y erradicar la discriminación
por raza o etnias.
También
menciono y e intento compartir lo que para mí son las posibles
soluciones que podrían ayudar; que las mujeres y hombres tengamos la
obligación de educar a los hijos para que se vallan forjando las
ideas correctas y las ideas obscenas de la discriminación no se
reproduzcan generación tras generación, pero al mismo tiempo, es
necesario que todos juntos como sociedad y asumamos una
concientización y ser sensibles hacia los problemas de este tipo,
porque solo así con que cada quien se esmere en arreglar su círculo
social podremos crear un camino para la nueva sociedad mejor donde la
convivencia basada en igualdad total y respeto sea la nota
predominante y en la que la desigualdad por género llegue solo a ser
un recuerdo sepultado del pasado, de la historia grisácea de la
humanidad, pudiendo llegar a borrar todo y cada uno de los vestigios
de la desigualdad y discriminación ya sea de género o cualesquiera.
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